La guía del teletrabajo

Antes de plantearse el Teletrabajo como una forma de realizar nuestro trabajo y de volverse loco recorriendo miles de páginas, en busca de alguna oferta, conviene seguir un pequeño protocolo, que nos ahorrará muchos quebraderos de cabeza.

¿Qué es Teletrabajo?

El teletrabajo es la realización de cualquier trabajo, en un lugar distinto del contratante y utilizando en cualquiera de las fases, medios telemáticos. Esta definición en su brevedad engloba todo el espíritu y la complejidad de esta nueva forma de desarrollar el trabajo.

Por una parte, queda claro que para que exista el teletrabajo es necesario que se haga uso de las herramientas telemáticas y por tanto, quedan descartadas aquellas hipótesis que preconizaban que las primeras teletrabajadoras fueron las costureras que llevaban a sus casas trabajo de las fábricas, ya que bajo esta misma teoría, el teletrabajo recogería a innumerables actividades.

¿Dónde puedo teletrabajar?

Al tratarse de una modalidad que teóricamente no depende de un emplazamiento físico, podría pensarse que es susceptible de realizarse en cualquier sitio, a modo de esos anuncios que muestran a un concentrado individuo que maneja un portátil en la cubierta de su velero, lo cual, no es en absoluto imposible, pero no es lo habitual, ya que, ateniéndonos a la inmensa mayoría de los casos conocidos, podemos enumerar tres escenarios posibles:

El hogar propio: sin duda, el caso más generalizado y el más cómodo para el trabajador. En un entorno absolutamente familiar, y una vez superado el test de auto evaluación para el teletrabajo, personalmente no se me ocurre ningún sitio en el que se pueda trabajar mejor, pero insisto, una vez aprobado el test.

Los centros de recursos compartidos: Se trata de locales, normalmente de propiedad pública, que disponen del equipamiento y el espacio necesario para quien pueda necesitar teletrabajar en cualquier momento.

Las oficinas satélite: Son oficinas que monta la propia empresa en un entorno a las afueras de las grandes ciudades y que les permite reducir los costos a la vez que posibilitan que los desplazamientos de los trabajadores sean menores.

¿Teletrabajador o tele-empleado?

Para muchos de los que buscan en el Teletrabajo la solución a sus problema de empleo, la frustración es alta, por cuanto las oportunidades de teletrabajar por cuenta ajena son muy pocas, fundamentalmente, por el desconocimiento por parte de los potenciales contratantes, de las posibilidades y ventajas del Teletrabajo. Si además, unimos la escasa implantación del trabajo por objetivos, es fácilmente comprensible, que las posibilidades para el hipotético tele empleado son escasas. Sin embargo, para personas con iniciativas propias y prestación de servicios, el Teletrabajo, está siendo una fuente de trabajo muy importante, claro que también, este régimen de alta supone un mayor nivel de gastos para el trabajador.

Autoevaluación

Es importarse hacerse algunas preguntas que generen las correspondientes reflexiones que den como resultado una visión realista de las posibilidades personales de afrontar esta forma de trabajo.

  • ¿Me gustaría teletrabajar o lo hago por necesidad?
  • ¿Que aportan mis servicios sobre los existentes?
  • ¿Soy capaz de administrar la discontinuidad?
  • ¿Estoy dispuesto a ser valorado sólo por mis resultados?
  • ¿Dispongo del equipo y el espacio adecuado?
  • ¿Soy capaz de separar la vida familiar de la laboral?
  • ¿Disfruto con el aislamiento social?
  • ¿Soy capaz de incorporar mejoras continuas a mis servicios?
  • ¿Estoy dispuesto a someterme a una formación continua?

La valoración del resultado es sencilla, ya que cualquier respuesta que no sea positiva te aleja claramente del necesario talante para teletrabajar.

¿Dónde encontrar teletrabajo?

Rotundamente, no existen ofertas específicas de teletrabajo, sencillamente porque el teletrabajo no existe como especialidad profesional. Ningún empresario demanda teletrabajadores, sino programadores, traductores, ingenieros o administrativos, y al igual que puede ofrecer unas condiciones de contrato mercantil o por cuenta ajena, también puede pedir que toda o parte de la jornada se realice sin desplazarse a la oficina, ya sea por falta de espacio o por necesidades logísticas.

No cabe, por tanto, esperar que exista un lugar específico en el que buscar ofertas de teletrabajo. Lo que si puede ocurrir es que con el paso del tiempo y el progresivo conocimiento del teletrabajo por parte de los empresarios, estos recurran a determinados espacios virtuales dónde saben que existen profesionales dispuestos a acogerse a esta modalidad, de ahí que en este mismo sitio web exista el interés de crear un índice de los sitios que tienen ofertas serias de trabajo, ya sean presenciales o no.

Como ayuda tenemos dos recomendaciones, primero usar las bolsas de empleo recomendadas y segundo leer atentamente nuestras recomendaciones para evitar caer en lo que no es teletrabajo, y que puede leerse en nuestra sección de chollos .